Sí a la integridad cultural

( Por Camila Arias 2do 3era.)

Nuestro país se caracteriza por estar compuesto de una amplia variedad étnica y cultural, lo que debería ser un punto positivo para la vida de los ciudadanos. Sin embargo, algunas de estas culturas no se sienten respetadas, por parte de otros ciudadanos y también del gobierno. En este caso, hablamos de los pueblos originarios.
Ellos son los verdaderos dueños de las tierras argentinas, y sin embargo pasamos sobre ellos apropiándonos de sus espacios y tratándolos como ajenos al pueblo argentino.
Faltas de respeto hacia ellos se ven constantemente:
• En Jujuy, por ejemplo, antes del censo de octubre de 2010 la presidenta dijo que era un censo importante porque incorporaba a los pueblos originarios. Sin embargo, la jefa departamental de Estadísticas y Censo de Jujuy, les negó la participación, y por ello decidieron no responder a la encuesta.
• Hace unos años, no podían documentarse porque no les permitían poner sus nombres indígenas en el documento.
• El pasado año, removieron en Viedma los enterratorios de los mapuches. Sufrieron grandes destrozos de los cementerios y también de los objetos culturales que se encontraban allí, como vasijas, morteros, flechas…
• La mayoría de las veces en que los pueblos originarios protestan contra el gobierno en forma pacífica, se ven violentados por los policías, cuando están haciendo huelgas justas y sin dañar nada ni a nadie. Se han producido muchas muertes de esa manera.
• Se sienten burlados cuando todos los discursos por parte de las autoridades sobre acciones a favor de los pueblos originarios, se quedan en discursos y nunca se materializan.
• En sus pueblos las calles y sus espacios tienen nombres que no los identifican para nada; quieren que lleven el nombre de la gente o de los eventos que para ellos son significativos.
Argentina es un país pluricultural porque está compuesto por muchas culturas diferentes, pero de ahí a ser aceptados por nuestros semejantes y por el gobierno, se necesita mucho trabajo. Creo que el primer paso para relacionarnos y aceptarnos con los pueblos originarios, es conocerlos. Ellos viven entre nosotros pero no de la misma manera, y como se dan las situaciones, ellos son los que tienen que adaptarse a nuestra forma de vida. Pero no saben cómo es nuestra vida cotidiana, y nosotros no sabemos cómo es la suya.
Una alternativa interesante para integrarnos es el intercambio cultural. Indígenas que nos enseñan el telar, o a preparar sus comidas; nosotros que les enseñamos la tecnología que manejamos. Además, ellos valoran la cultura mucho más que nosotros, y para que permanezca, deben enseñarla y compartirla con otros.
Muchas veces se han propuesto como un organismo que puede colaborar con las instituciones para el medio ambiente, ya que ellos veneran a la madre tierra y a toda la naturaleza. Si los aceptaran sería una buena forma de integración, es como una voz que se quiere hacer oír, pero que callamos.
Si entre nosotros pintamos murales sobre la unión de estas dos culturas, en una actividad que también sirve; demostrar el aprecio y la unificación por medio del arte, como lo han hecho grandes cantantes argentinos con la música.
Hay mucho que podemos enseñarles y mucho que podemos aprender, pero el primer paso y el más importante es querer hacerlo.